A pesar de que el enfoque tradicional a la hora de abordar el diseño de los sistemas distribuidos se basaba en comunicaciones de red, seguridad, gestión transaccional, glosario y ubicación, con la arquitectura orientada a servicios es distintos, las preocupaciones se centran en dos aspectos:
Comunicación.
Integración de servicios.
A la hora de evaluar la arquitectura construida hay que fijarse en:
Capacidad de modificación.
Rendimiento.
Fiabilidad.
Disponibilidad.
Seguridad.